Y hoy peso:

Y hoy peso:

Añadiendo ensalada casi por sistema, pero ensaladas ricas, muy-muy ricas (Herramienta 4)

Añadiendo ensalada casi por sistema, pero ensaladas ricas, muy-muy ricas (Herramienta 4)
Una clave: cuidar el "gato por liebre" en los productos

viernes, 2 de agosto de 2019

El principio del no sufrir en el control del peso


Charrando del tema. Hace 25 añitos pesaba 100 kg en la báscula.

Ahora, ya con 65, ¿cómo sería mi vida de haber mantenido tantos años semejante sobrepeso?, ¿cuantas medicinas tomaría a diario?, o ¿con qué, digamos agilidad, me movería...?
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La clave: No pasé hambre, no, no pasé hambre; y como no pasé hambre, pues no pasé penas; y como no pasé penas... pues todo "fluyó"




Tampoco desequilibré nada, no dejé de tomar ningún grupo de alimentos



(Fundamentado en la teoría Higienista, antigua por cierto, de que nuestro cuerpo utiliza las células grasas para almacenar toxinas)

La mecánica


Recetario practicón fundamental:



Un proceso combinando a la vez 5 herramientas


- Herramienta 1Agua: beber mucha agua, "sorbito va - sorbito viene", entre comidas (y utilizo un truco personal para que me resulte más agradable)...






- Herramienta 2
. Durante la mañana, digestión fácil

Tomar por la mañana, y hasta el medio día, solo alimentos de digestión muy sencilla








- Herramienta 3.-Simplificar la digestión en el estómago...



Ir hacia comidas muchísimo más simples, por ejemplo: en este caso eran lentejas con verduras; ¿cantidad?..., hasta que el cuerpo diga que ya está SACIADO. ¿Y para qué más dentro de una misma comida?



En ese caso cena de plato de carne, ¿Y para qué más dentro de una misma cena?


Aquí, comida de arroz con puerros. Sencilla a más no poder (y muchísimo más sabrosa de lo que parece porque ese arroz no se coció en agua precisamente), ¿Y para qué más platos a la vez?


- Herramienta 4
Lo que casi nunca quiero que me falte, ensalada 

Ensalada "con"...

Pero, ojo, una ensalada de las mmmmmmhhhhhh...., riquísima hasta no poder más (el Principio del Placer)


- Herramienta 5. Activando el metabolismo... (he seguido en ese punto fielmente, y consistentemente, a la OMS)

Ejercicio. Para mi, ejercicio aeróbico sin llegar al sobrealiento y mantenido un buen rato al día, casi todos los días


Con el arte de elegir lo que me ha venido bien en cada etapa o momento, antes era ir y venir andando al trabajo; ahora, ya jubilado, utilizando lo que está a mi mano (por ejemplo, cogiendo y llevando piedras al jardín)
..................

Y hay más cosas, por ejemplo, hoy la tecnología aporta herramientas que hace unos años eran completamente in-soñables para apoyar el resultado, y para mantenerlo después en el tiempo

Hace 20 años yo no podía estimar de forma práctica mi grado de grasa corporal, o...

jueves, 11 de mayo de 2017

Ese (casi insultante): "es que no te has mantenido firme"


Alimentación y ejercicio siempre nos ha parecido que son la combinación necesaria para perder peso.


La teoría de "Calorías IN versus Calorías OUT", o, lo que es lo mismo: comer menos y gastar más, ¿es esa la solución?
Pues parece ser que no. La homeostasis del cuerpo y su juego hormonal vencen a la teoría de quemar más de lo que ingerimos, y el comer menos  (salvo casos verdaderamente extremos)..., al final ¡no funciona!.


Mecanismo:

Pongamos que una persona obesa ingiere una alimentación equivalente a 2.500 Kcal al día y, para perder peso, decide reducir la ingesta a 2.000 Kcal. Inicialmente perderá unos kilos pero al cabo de unos días el cuerpo, que no va a seguir perdiendo  kilos hasta quedarse en "Cero kilos", se adapta y baja el metabolismo basal, consiguiendo que con 2.000 kcal el peso se estabilice.

La persona, al ver que se estanca, decide comer menos, digamos 1.500 kcal diarias y consigue perder un poco más, pero el cuerpo a los pocos días vuelve a adaptarse y consigue regular el gasto y economizarlo hasta igualarlo, sin conseguir que la persona siga perdiendo peso. Se reduce el metabolismo basal y la producción de calor. Tenemos más frío y nos cansamos más con las mismas actividades. Además, el hipotálamo manda señales de hambre a la persona para ingerir más comida, con lo que la persona está más hambrienta, irritable, de mal humor.



Finalmente, tras varios meses sufriendo, la persona se cansa y vuelve a comer normal, como antes. El cuerpo, que es muy listo, mantiene ese metabolismo de ahorro energético hasta que recupera el peso anterior y, a veces, incluso lo supera. Ganando sobre todo grasa, con lo que terminamos peor de como empezamos. Un desastre, entonces todos culpamos al obeso de no tener fuerza de voluntad, de ser un débil, de no haber mantenido sus principios. "No te has mantenido firme", le dirán los demás


martes, 29 de junio de 2010

La Barriguita



"El 80% de las personas sometidas
a una dieta recuperan la mayor
parte de los kilos perdidos en sólo
un año"



Sobre temas digamos de “barriguita” hay tantas opiniones, y tan distintas entre sí, que se puede alucinar de lo lindo contemplando lo variopinto del panorama, claro que casi todas las corrientes un poco serias afirman lo mismo: El fenómeno social al que llamamos “dietas” no sirve de mucho, con suerte se pierden ¿pongamos 10 kilos? en un periodo, para engordar ¿pongamos 11 kilos? después … ¡Y vuelta a empezar!

A cantidad de gente de todas partes les ha ocurrido algo parecido a eso, y al final queda el chiste: “el único material que de verdad no engorda es el cartón”, así cada cual cuenta la historia según le va. Particularmente yo sigo la escuela llamada “higienista, muy, muy antigua por cierto. Para el higienismo la acumulación de grasa se produce con frecuencia como una manera de almacenar en ella (más o menos a buen recaudo) ciertas moléculas tóxicas que no se han eliminado por otras vías




La grasa corporal haría así (con perdón) a guisa de “almacén” de substancias nocivas o peligrosas, y la clave consiste entonces en facilitarle al cuerpo que pueda quitárselas de en medio de otras maneras. Entonces, y por ello, el exceso de grasa se trataría como un "daño colateral" de otro problema aparentemente muy distinto, a saber:


La acumulación de toxinas


Nada que ver entonces con alimentos milagrosos, o con privarse del necesario aceite, o de la riquísima pasta, o con andar contando calorías como quien controla los “rojos” en una cuenta bancaria.

Así que he utilizado, y utilizo, otro tipo de enfoque y de herramientas